Por los altos andamios del somnoliento cielo.
Donde solo estrellas y aladas flores alcanzan.
Quiero niña mía hacerte adiamantada rosa,
nunca dejar de abrazarte.
Beso a beso, tomaré luz de errantes estrellas,
las hilaré en los telares del cielo
Entrelazada con amor, ternura y deseo,
confeccionaré la más mágica tela.
Haré la mas hermosa hamaca, para ser prendidas
En las lamparas bellas del infinito nocturno firmamento.